En el momento de buscar colaboradores y personal para tu empresa, debes evitar estos tres tipos de personalidad en el momento de contratar. Te decimos cómo identificarlos desde la entrevista de trabajo y evitar que afecten tu negocio:
1. El narcisista
Uno de los tipos de personalidad más peligrosos en un lugar de trabajo es el narcisista. Es fácil cometer el error de contratar a alguien con narcisismo, debido a que por lo general son carismáticos e irradian seguridad en sí mismos. Sin embargo, los narcisistas tienden a manipular a los demás en la oficina, suelen ser irresponsables y se niegan a aprender de los errores.
De hecho, tienen algunas características parecidas a los psicópatas, según Robert Hagan, presidente de una firma de valoración de la personalidad en Oklahoma, Estados Unidos. “El problema es que un narcisista tendrá un buen desempeño en la entrevista. Pueden llevarse bien con quien sea. Pero en realidad todo se trata de ellos mismos”.
Cómo identificarlo: Un narcisista tiene un aire arrogante, así es que debes fijarte en el lenguaje corporal del candidato para descubrir cualquier señal de fanfarronería. Cuando le preguntes acerca de su experiencia trabajando en equipo, ¿se enfocan únicamente en sí mismos o hace alguna observación de desprecio hacia un miembro del equipo? Ésas son señales de peligro que puedes advertir cuando entrevistas a un narcisista.
2. El holgazán
Mientras que el comportamiento de este individuo es mucho más pasivo que el de un narcisista, es esta misma pasividad la que te volverá loco a ti y a tus empleados. La gente que es excesivamente floja cuando se trata de trabajar en equipo puede ser igual de dañina que la narcisista. Este tipo de personalidad es particularmente problemática en un negocio pequeño donde cada individuo cuenta.
Los holgazanes generalmente dejan que los demás hagan su trabajo por ellos y toman una actitud agresiva-pasiva en la oficina. Este comportamiento creará resentimiento en los demás que sienten que tienen que cargar más peso. “Es un golpe a la moral”, señala Howard. “Es extremadamente importante que la gente perciba que todos están haciendo su parte”.
Cómo identificarlo: Necesitas valorar el nivel de energía del candidato durante la entrevista. Para tener una noción de cuánta energía tiene una persona, presta atención no sólo a lo que dice, sino también a cómo lo dice. Howard sugiere llevarse al prospecto a por una taza de café en plena entrevista. Es una forma sutil para observar sus movimientos y ver si puede seguir tu paso.
3. El súper emocional
Mientras la mayoría de la gente puede controlar sus emociones durante una entrevista laboral, puede que esté conteniendo sentimientos agresivos, dice el psicólogo Michael Mercer. “Pueden actuar encantadores, aun siendo unos monstruos”, afirma. Las personas demasiado emocionales son reticentes a seguir las reglas, pesimistas y majaderos.
Éste es el tipo de empleado que golpea las puertas y se queja constantemente. El resto del personal sentirá que debe andar en puntitas alrededor de él, y esta negatividad explosiva puede ser contagiosa.
Cómo identificarlo: Incluso los candidatos muy emocionales evitarán quejarse durante las entrevistas. Pregúntale por qué no le gustaban su trabajo y jefe anteriores, y probablemente recibirás una respuesta ensayada. Pero si lo presionas pidiéndole dos ejemplos y lo retas a que sea más específico, harás que respondan espontáneamente. Fíjate en su reacción: ¿Se puso malhumorado cuando lo retaste o se enfocó únicamente en asuntos negativos? Ahí está tu señal.